Yo más que tú.

Lo más sorprendente de tus argumentos es asegurar que si tú lo sufriste, alguien más debe sufrirlo y aguantarlo. Querer evitar eso sería lo más lógico, pero así no somos aquí, aquí queremos comparar quién se esfuerza más, quien se sacrifica más, quién aguanta más por alcanzar a realizar sus sueños. Entristece y decepciona esa forma de pensar, que esa idea errónea y horrible se instale en el seno familiar y con ella haya que alimentar a toda una generación.