The actor.

Contar los papeles que he representado es difícil, es una tarea que me llevaría mucho tiempo. Me considero un intérprete muy realista y eso lo he logrado por mi dedicación a mi carrera.
La fama es un objeto precioso para muchas personas pero a mí me ha resultado desagradable, permitir que las personas se inmiscuyan en mis asuntos y que se preocupen de forma desinteresada me provoca nauseas.

Quiero hablar del papel más difícil que he tenido que interpretar, pero en realidad no sé cómo describirlo.
Sucede que he interpretado hombres con enfermedades, éxitosos, millonarios, pobres, ancianos, jóvenes, villanos, holgazanes, héroes, hombres con suerte y sin ella, cada uno ha resultado difícil en distintos grados pero el papel más difícil que he tenido que interpretar es el de ser una página.
Si, una página, blanca, plana, delgada y escrita. Lo más difícil es estar escrito, resulta confuso pero mi interpretación parecía casi involuntaria.
Es muy difícil ser una página, estar escrito aumenta el grado de complejidad al personaje, aunque en realidad el director lo único que me pedía era que fuera yo mismo. Para mi resulto difícil definirme como personaje y como una página escrita.

La historia que interprete era larga, igual de compleja que mi papel, pero logre sacarlo adelante. Justo en el momento en que  yo sentía que mi actuación estaba siendo fenomenal, la obra dio cambio, me avisaron que tenía un nuevo guión y que mi participación llegaba al momento clímax de representación. Me emocione.
Naturalmente no tenía idea de cuál era el momento decisivo o más importante dentro de la vida de una página y dentro de mis investigaciones con mis actores favoritos y admirados, no encontré respuesta a mi cuestión.
El momento en que tome el guión en mis manos me di cuenta de que era muy ligero, apenas unas hojas sueltas. Lo abrí ansioso de conocer que decía y encontré:

*Pasa a la siguiente página*

No supe como sentirme, me había sentido tan cómodo siendo una página y al ser rebasado por otra el cólera invadió mis venas. Fue la interpretación más tediosa, no sabia como dar vuelta a la página. 
Me sentí olvidado y me importaba mucho ser una página. Yo no di vuelta a la página, alguien más lo hizo por mi y eso resulto peor. 
Ha sido el papel más intenso e importante de mi carrera, lo recuerdo y lo extraño.