Desde que tengo este nuevo ordenador y esta nueva imagen de blogger, mi
inspiración se ha esfumado, ha cambiado y las frases cortas son predominantes
en mis entradas. Se me terminaron las historias y me siento fastidiada de
contar mis malestares. Voy a leer para que otra vez empiece a escribir.
En realidad, no he parado de escribir pero ahora todo es privado, soy
envidiosa y me gusta guardarme muchos secretos. Nada personal.
Tengo muchas madrugadas por delante, estoy desperdiciando mis noches de
sueño porque los ritmos se me alteran muy fácilmente una vez que no estoy
ocupándome en las labores escolares. Las personas me preguntan qué haré en
estas vacaciones y yo me pregunto qué hace la gente en vacaciones, ¿se sumerge
en proyectos vacacionales, realiza actividades muy distintas a las de los días
de escuela, o simplemente se queja porque no tiene nada que hacer? Siento que
mis actividades son aburrida, porque paso las semanas leyendo,
pintando y cosiendo vestidos para mí, esas son mis actividades vacacionales,
incluyendo salidas esporádicas. En diciembre me pasa que no quiero ver a las
personas, un sentimiento fraternal me ahorca sin aviso y me paso horas en casa
con mamá viendo series. Soy aburrida, ya sé.