Mi prometida

Éramos tan jóvenes. Yo la conocí primero, estábamos en el último año de la secundaria, ella recién llegada de no sé donde, una vecina no  muy cercana. Digo que yo la conocí primero porque la vi cuando cruzo la puerta de la escuela, ella llegando tarde y apresurada, yo puntual y con la cara fría en la fila, tomando distancia. Tenía catorce años me emocionaba con cualquier niña de cabellos castaños que fuera distinta a las de la secundaria. Terminamos el colegio, prácticamente en cuestión de meses y en esos meses yo nunca le hable, llegue a molestarla indiferentemente mientras molestábamos a las demás niñas de los otros salones. Hasta ahora que hago memoria recuerdo que ella estaba entre esas niñas.
Para suerte era vecina de la misma colonia así que los muchachos no tardaron en invitarla a ver los partidos de béisbol y las muchachas en hacerla su amiga invitándola a las pijamadas.

Las coincidencias nunca nos favorecieron o creo que no me favorecen a mí, fue que al entrar a la preparatoria tuvimos que tomar caminos distintos, recuerdo que ella estudiaba muy cerca del vecindario mientras yo tenía que ir hacia el sur. Después de eso me di cuenta de que tenía que invitarla a salir porque el destino no nos arreglaría una cita. Un año después de haber tomado esa decisión le pedí que saliéramos, sin todos los de cuadra. No recuerdo mucho de la primera cita pero sé que no hubo un beso.
Tuve cientos de citas después de esa, tratando de averiguar que había salido mal con ella para que no me besara, todas mis demás citas me besaban al finalizar la tarde menos ella. Después supe que no besaba a nadie en su primera cita.
Continuamos saliendo y después nos hicimos novios. La verdad, no estaba seguro de si quería tener una novia, pero ahí me tienes con diecisiete años y una novia.

Mi primera chica, la primera en muchas cosas. Estuvimos puestos de novios por más de tres años casi cuatro luego me anime a pedirle que se comprometiera conmigo, recuerdo que cuando se lo pedí me dijo las palabras más dulces que he escuchado: Lo hice desde que te conocí. La mujer con la que debía casarme.
Todos los planes para la boda corrieron a cargo suyo, todo lo que ella esperaba de una boda fue planeado meticulosamente por ella y mi madre.
Poco más de tres años comprometidos, después de todo eso conocí a tu madre y me case con ella.