Blah blah blah.

Lo bonito de los niños y los ancianos es que ambos no hablan. Cuando un ser humano descubre que puede pensar que puede formar una idea y después formar una oración para expresarse es tan irritante. No siempre es el caso que nos encontremos con personas que hablan padre, digamos que de entre unos mil sujetos tres hablan y se expresan bien, el resto solo abre la boca para decir estupideces. Aunque también tenemos a los inteligentes que dicen estupideces pero esos casi siempre están en círculos sociales que entienden sus estupideces.

¿Por qué la gente tiene que aprender a hablar? ¿Por qué tenemos que comunicarnos? ¿Por que al hablar se tiene que arruinar la imagen de una persona?

La gente siempre habla, sino hablan se aburren, y si hablan muchos se estresan, entonces que no es mejor el silencio.

Cuando un niño sabe que puede pedir las cosas por su nombre, empiezan los problemas: exige hace berrinche , llora, dice groserías y todo su sentido del lenguaje se encierra en: quejarse. Con el paso del tiempo los adolescentes y adultos seguimos este comportamiento y para lo que abrimos la boca es para quejarnos, cuando adquirimos la madurez y estamos en la edad adulta decidimos callar porque ya nadie nos escuchara.

Todos seriamos más felices si solo habláramos lo suficiente y actuáramos lo necesario. Hablar es una cosa muy sencilla, entonces ¿por qué coño nos cuesta tanto hablar con extraños?

El claro ejemplo es este, yo solo abrí este blog para abrir mi bocota quejarme, decir algunas estupideces y cada lustro escribir algo interesante.


Silencio.